No podéis negarme que a vosotros también os ha pasado. Te metes en la cama y comienzas a divagar sobre lo que te ha sucedido durante el día y lo que harás mañana y, entonces, piensas en tu blog. Y en lo interesante que es ese artículo que has leído hoy, y en lo bien que quedaría un artículo hablando sobr-…ZzzZZZz
Y a la mañana siguiente, nada. No es que no recuerdes las ideas o, al menos, algunas prevalecen. Es que no tienen el mismo gancho. Parece que entre el roce de la sábanas y la quietud de la noche las ideas hubiesen tenido un sentido que ahora, ante la luz del día, se encuentra perdido y convierten la idea en algo banal y sin chispa.
Hasta ahora pensaba que era algo que sólo me sucedía a mí, pero parece que es algo bastante extendido.
Lo siguiente es la frustración. Frustración porque la noche anterior tuviste 20 estupendas ideas, y no es que no puedas recuperarlas ¡si no que ahora no se te ocurre ninguna! Revisas tu RSS, las últimas noticias, divagas con tu mente sobre «el artículo de hoy». Nada.
Entonces hubiese deseado haberte levantado anoche, haber encendido el portátil y literalmente «escupido» todo lo que tenías dentro de la cabeza. Tal vez estructurarlo al día siguiente.
Soluciones
Después de que esto sucediese varias veces decidí coger una pequeña libreta y escribir, en una línea, el concepto del artículo para poder escribirlo al día siguiente.
¿El problema? Que seguía sin tener el mismo ímpetu. En la cama era capaz de redactar mentalmente el artículo, una atractiva introducción, con un denso y divertido cuerpo, y una magnífica conclusión. Y ahora, sólo puedes repetir esa frase anotada en el bloc una y otra vez.
Otra solución es extenderse más en el bloc. Pero, en lugar de tener un frase en la que encasquillarse, tenemos 5 y, además, inconexas.
Finalmente, he determinado que dejaré el portátil cerca de la cama. ¡La idea resulta casi absurda! Pero me niego a dejar que las musas ganen esta batalla horaria y me lleven a ser infiel a mis lectores con mi almohada.
Si funciona, os lo haré saber 🙂
Cuanta razon tienes compañero.
Ayer eran las cuatro de la mañana y no podia dormir,
porque las ideas me inundaban.
Y hoy estoy en blanco,xd!!!
Seremos igual que los artistas…
No se pero, lo unico que te puedo decir es,
que hoy tengo sueño.
Anoche me volvió a suceder, por supuesto. Y justo acababa de apagar el portátil.
Creo que no hay manera posible de romper la maldición.
Se aceptan sugerencias 😉
Te creo, te creo del todo! A mí me pasa mil veces… y eso que no soy blogger! (por ahora)…
Por cierto, me encanta ese momento "Parecidos razonables" de tu post… la chica que muerde el ordenador es calcada a María Castro, la actriz gallega… y sagitario (como yo)!! A que sí??? Sí o no??? Sí o no??? Pues eso!
Un saludo!
Fíjese usté que no sé ni quien es María Castro (que poca culura…)
Pero la foto es de stock, dudo que sea ella 😛
Solo te deseo que nunca se te caiga el portatil cuando en mitad de la noche quiers escribir lo que tienes en mente, porque a veces nos despertamos tan torpes que tenemos los reflejos donde la espalda pierde su nombre.
¡No digas eso! ¡Esperemos que no! Lo cierto es que al final sigo con la libreta…. Aunque me cueste reconocerlo.